Los datos afirman que el 45% del personal permanecerá menos de seis meses en su empleo. Esto debería suponer un toque de atención para las empresas, sobre todo teniendo en cuenta que tener empleados motivados es un factor esencial para alcanzar el éxito empresarial
Según un estudio realizado por Bumeran, la firma de recursos humanos y bolsa de trabajo, el 45% del personal permanecerá menos de seis meses en su empleo. En el mercado laboral actual, que trata los empleados como meros instrumentos y no como activos valiosos para la empresa, es muy importante ser consciente que la rotación de personal no sólo afecta negativamente a los empleados, sino también a la organización. En primer lugar, veamos cuáles son los principales motivos que hacen que un empleado quiera abandonar su puesto de trabajo:
- Falta de conciliación laboral
- Horarios de la jornada laboral
- Mal ambiente laboral
- Falta de reconocimiento a su trabajo
- Insatisfacción o estancamiento en el mismo puesto
- Sueldos inadecuados
El factor humano, es decir, nuestro equipo, es una pieza vital para alcanzar el éxito empresarial, así que deberíamos hacernos la siguiente pregunta: ¿estamos ofreciendo a nuestros empleados un entorno laboral saludable en el que quieran quedarse? Nuestra política de RRHH debe encargarse de que así sea.
Muchas empresas consideran que renovar constantemente su personal no provoca ningún efecto negativo en la organización, que es más rentable y sólo ofrece ventajas, pero lo cierto es que lo que parece una buena idea a corto plazo, puede acabar volviéndose contra nosotros a largo plazo. Veamos las desventajas que supone la rotación constante de personal:
- Costes: el tiempo que perdemos en el proceso de reclutamiento y selección de personal, capacitación y contratación, y sobretodo formación. Sin duda una política de recursos humanos que contemple una plantilla de empleados estable nos será más rentable a la larga.
- Imagen de la empresa: todos sabemos lo importante que es la reputación para el desarrollo de nuestra actividad económica, y la rotación de personal constante no es buena publicidad. La inteligencia empresarial sin duda pasa por una filosofía de empresa respetuosa con los trabajadores.
- Falta de ?sentimiento de equipo?. Los empleados deben conocer constantemente nuevos compañeros y no se llegan a formar relaciones estables. ¿Demostramos más productividad cuando trabajamos en equipo con un desconocido, o con un compañero con quien tenemos una buena relación?
- Dificultad para desarrollar nuestro proyecto empresarial con éxito. Un equipo de empleados motivados y comprometidos con nuestra organización sin duda son un bien imprescindible para la mejora de productividad.
- Escasa motivación = menos productividad. Si el empleado sabe que en pocos meses ya no estará en esa empresa, es más difícil conseguir que ese empleado se comprometa con nuestra organización y trabaje a pleno rendimiento.
- Clientes: en algunos negocios hay algunos clientes que siguen confiando en nuestra empresa porque un empleado en particular les genera simpatía o confianza.
Estas son sólo algunas de las desventajas que nos podría ocasionar la rotación de personal en nuestra empresa, la lista podría seguir.
¿Cómo evitarlo?
Ya hemos visto cuáles son las causas que nos llevan a perder empleados, así que sólo hay que ponerles remedio. Nuestra política de RRHH debe ofrecer a nuestros empleados unas garantías: la conciliación laboral es una pieza clave para que nuestros empleados se sientan satisfechos con su trabajo. Apostar por un horario flexible en la oficina, que valore a los empleados por sus resultados y no por el presencialismo en la oficina, sin duda hará que se sientan valorados. La motivación es una herramienta que sin duda debemos utilizar para llegar al éxito empresarial. No hay que olvidar que el tiempo que invertimos en motivar a nuestros empleados se nos devolverá en forma de beneficios. Los empleados satisfechos son empleados más productivos.