La justicia europea afirma que para cumplir con la normativa comunitaria, España y el resto de los estados miembros "deben imponer a los empresarios la obligación de implantar un sistema objetivo, fiable y accesible que permita computar la jornada laboral diaria realizada por cada trabajador". Argumentan, también, que sin un sistema de este tipo, "no es posible determinar objetivamente y de manera fiable el número de horas de trabajo efectuadas por el trabajador ni su distribución en el tiempo, como tampoco el número de horas realizadas por encima de la jornada ordinaria que puedan considerarse horas extraordinarias"
El TJUE afirma en que es muy importante conocer el número de horas de trabajo diario y semanal para comprobar que no se sobrepasa la duración máxima de la jornada así como los periodos mínimos de descanso. Se estima que, en España, alrededor de un 54% de las horas extras no se registran.
Asimismo, el TJUE insiste en que los sistemas deben ser "fiables y accesibles" ratificando en cierto modo lo que publicó el ministerio en su guía de registro de la jornada que especificaba que los sistemas deben "proporcionar información fiable, inmodificable y no manipulable a posteriori, ya sea por el empresario o por el propio trabajador"
Aunque se anunció que habría una cierta flexibilidad durante dos meses y que, en caso de inspección, no se multaría a las empresas siempre y cuando puedan demostrar que han iniciado los tramites de implementación de control horario, está claro que los empresarios españoles no tienen más remedio que cumplir con la nueva ley de control horario.
A partir de ahora deben buscar herramientas que les permitan llevar a cabo el control horario y que sean las más adaptadas posibles a todas las formas de trabajo que se encuentran, hoy en día, en las organizaciones.
Soluciones como Time@Work ofrecen un software de control horario totalmente automático, objetivo y adaptado tanto si los empleados trabajan desde la oficina (con horarios fijos o flexibles) como si trabajan desde casa.