El control del teletrabajo y las herramientas SaaS
La Reforma del Mercado Laboral de 2012 (Real Decreto-ley 3/2012 de 10 de febrero) supone por primera vez la regulación del acuerdo de trabajo a distancia, o teletrabajo, entre trabajador y empresario. Frente al concepto de trabajo a domicilio que se recogía en el artículo 13 del Estatuto de los Trabajadores (Ley 8/1980 de 10 de marzo de 1980, EDL 1980/3059) aparece la figura del trabajo a distancia, que conlleva un control del empresario frente al «sin vigilancia del empresario» que se le presuponía a aquél.
En la definición de la ley sobre el teletrabajo, lo que en realidad queda establecido es una nueva forma de trabajar, que se lleva a cabo de manera preponderante desde el domicilio u otro lugar, aunque no de manera exclusiva. Así, el teletrabajo se define como:
- La nueva modalidad de trabajo de carácter no presencial.
- Que se basa en una orientación a la consecución de resultados.
- Y se apoya, en la mayoría de ocasiones, en las tecnologías de la información y comunicación, lo que posibilita a los empleados el que puedan realizar parte, o incluso toda la jornada, desde su domicilio particular u otros emplazamientos, pudiendo llegar a una completa deslocalización.
El control del teletrabajo y las herramientas SaaS
Por primera vez en la nueva ley se habla del control del empresario en el trabajo a distancia. Esto le da derecho a controlar al teletrabajador. Anteriormente, con el trabajo a domicilio no se detallaba este aspecto (ya que se hacía hincapié en la cualidad de «sin vigilancia del empresario» de esa modalidad laboral).
Aunque, al mismo tiempo que queda establecida la legitimidad de este control de empleados, también se declara la necesidad de que el trabajador disponga de los medios y la tecnología necesarios para poder desarrollar su trabajo.
En el mercado, existen herramientas SaaS (softwares de pago por uso) que facilitan el trabajo de estos empleados a distancia y el control de su rendimiento. Algunas de ellas son: WorkMeter, Skype, Gtalk, hangouts de Google, redes sociales corporativas (como Yammer), servicios de VoiP, calendarios compartidos, Google Docs, Skydrive, Dropbox, etc.