Continuamos esta serie de artículos viendo hoy cómo podemos ahorrar costes mediante nuestras compras.
La pasta está en la compra
La reducción de costes en las empresas es hoy más que nunca una necesidad. Las empresas se preocupan en aplicar políticas, entre otras, de contención y ahorro en energía, flotas y desplazamientos, gastos generales etc.
La mentalidad de ahorro y su reflejo en un plan estratégico
La teoría está clara pero hay organizaciones que se encuentran con verdaderas dificultades a la hora de definir el plan de ahorro y ponerlo en marcha. Si es el caso de tu empresa, antes de seguir adelante quédate con esta premisa:
?Nunca compre nuevo lo que pueda comprar de segunda mano; nunca compre de segunda mano lo que pueda alquilar; nunca alquile lo que pueda pedir prestado; nunca pida prestado lo que pueda mendigar, y nunca mendigue lo que pueda rescatar de un naufragio?
(Fuente: Creación de empresas para emprendedores)
En esta frase se resume lo que se conoce como mentalidad de ahorro y es precisamente lo contrario a la forma en que se han vivido algunos de los últimos años, en los que el derroche de recursos era la política más habitual en muchas empresas.
Cómo ahorrar en las compras
El dinero sale por la puerta en el momento que necesitamos realizar algún tipo de adquisición, por ello es en este tipo de operaciones en las que hay que controlar el capital más de cerca. Ejemplos de buenas prácticas que nos ayudarán a reducir costes son:
- Las alianzas estratégicas para negociar volúmenes
- La negociación de precios con proveedores.
Respecto a las negociaciones de este tipo, que se pueden poner en marcha en cualquier momento, y ¿por qué no? Inmediatamente, es importante tener en cuenta las siguientes reglas:
- Siempre hay una oportunidad de re-negociación de costes al vencimiento del contrato con tu proveedor.
- Si no tienes liquidez, pide ampliar los plazos de pago.
- Si tienes liquidez, intenta negociar descuentos por pago puntual.