
1. Incremento de la rentabilidad
Las empresas experimentan un aumento en la rentabilidad cuando resulta menos costoso producir sus bienes y servicios. Cuando los trabajadores se vuelven más eficientes, se requiere menos trabajo para producir la misma cantidad de bienes. La compañía podría optar por reducir el número de empleados para producir el mismo rendimiento, pero si elige mantener la misma cantidad de trabajo, se beneficiará de un aumento en el rendimiento.
2. Bajando los costos operacionales
Las empresas pueden reducir los costos operativos a través de una serie de iniciativas. Si los trabajadores individuales mejoran su flujo de trabajo personal, producirán más en menos tiempo o reducirán la cantidad de horas que necesitan para trabajar para lograr el mismo rendimiento. Los costos operativos a menudo se pueden reducir mediante una inversión en tecnología, y con el tiempo, los procesos mejorados pueden llevar a una reducción en los costos laborales. La introducción de semanas flexibles y de tres días puede ver un aumento de la productividad cuando las personas se sienten más valoradas y comprometidas y sufren menos estrés como resultado de menos desplazamientos. A menudo, las personas pueden lograr la misma cantidad de trabajo en tres días flexibles como lo habían hecho anteriormente en una semana.
3. Optimizando recursos
Normalmente, las empresas no utilizan sus recursos al máximo potencial. Los empleados están ocupados parte del tiempo y buscan trabajo para hacer en otros momentos. Una mejor gestión de recursos humanos ofrece una gran oportunidad para reducir costos y aumentar la productividad. Una mejor distribución de roles y un personal más efectivo pueden marcar una gran diferencia, la diferencia entre pérdidas y ganancias. La utilización óptima de la fuerza laboral debería estar en la agenda para el cambio. Los sistemas de flujo de trabajo mejorados identificarán los lugares donde los roles se superponen. Las empresas pueden corregir situaciones en las que los empleados no están acostumbrados a su máximo potencial y pueden comenzar a utilizar sus recursos de manera eficiente.
4. Mejorar el servicio al cliente
Las mejoras en la productividad generalmente se sienten en toda la organización. Uno de los beneficios externos viene cuando los clientes reciben más tiempo y atención. Los sistemas funcionan mejor, y el cliente siente el beneficio. Por supuesto, cuando el cliente se beneficia, la compañía se beneficia porque los clientes felices llevan a gerentes y accionistas felices.
5. Aprovechar la oportunidad para el crecimiento
Un aumento en la productividad es siempre una oportunidad para el crecimiento. Cómo se utiliza este aumento depende de la administración. Si el aumento de la productividad resulta en más tiempo para los empleados, es importante controlar cómo se gasta este tiempo. Puede acostumbrarse a tareas mundanas y actividades de pérdida de tiempo que se presentan como tareas válidas. No se deje engañar: una pérdida de tiempo es siempre una pérdida de tiempo, y si no fue lo suficientemente importante como para dedicarle tiempo antes de las mejoras de productividad, no merece tu tiempo ahora.
6. Reducir los residuos medioambientales
El medio ambiente sufre cuando las personas no son eficientes. Si no estás organizado e inviertes diez horas para hacer el trabajo que podría hacerse en seis, estás usando cuatro horas de electricidad adicional que no necesita ser utilizada. Cuando no te fijas bien en la forma en que haces las cosas, pierdes tiempo, dinero y recursos. Cuando optimizas, creas un entorno de trabajo más agradable y más saludable, lo que resulta en una mayor productividad y enfoque entre los empleados. Un buen diseño de edificio que maximiza la luz natural conduce a una reducción en los costos de iluminación, así como a un aumento en la productividad y el bienestar de los trabajadores debido a los buenos niveles de luz diurna en el edificio. Los niveles de iluminación pueden tener un impacto significativo en la productividad y el estado de ánimo de las personas que trabajan en la oficina.
7. Mejorar la competitividad
Cualquier cosa que pueda hacer más rápido, más eficiente o mejor que sus competidores le da una ventaja. El aumento de la productividad conduce a una mayor competitividad. Si puede producir sus productos a un costo menor que su competidor, puede cobrar menos. Si puede entregar su servicio más rápidamente que su competidor, puede atender a más clientes o puede aumentar el tiempo dedicado al servicio al cliente, aumentando su valor agregado para el cliente.
Todo el mundo es consciente de la multitud de beneficios que las organizaciones obtienen de los aumentos de productividad, pero los beneficios para los empleados pueden no ser tan conocidos como los observados por los contadores y los financieros.
8. Reducir el agotamiento de los empleados
Cuando las personas tienen mucho que hacer y no tienen suficiente tiempo para hacerlo, esto puede desembocar en estrés, agotamiento o agotamiento total. Trabajar de manera más eficiente, ya sea una reducción en el tiempo empleado en los procesos diarios o una reasignación de roles y responsabilidades, hace que las personas puedan lidiar mejor con su carga de trabajo y cumplir con sus responsabilidades en el tiempo asignado a ellas. Esta es una consecuencia positiva tanto para el empleador como para el empleado. Una mejor administración del tiempo conduce a empleados más organizados, relajados y eficientes que pueden concentrarse en sus tareas diarias en lugar de preocuparse por todas las cosas que no están logrando.
9. Mejorar el bienestar
Otro beneficio de la productividad mejorada es el bienestar personal. El bienestar puede describirse como un estado en el que un trabajador está sano, cómodo y feliz. Cuando tiene más control sobre su carga de trabajo, puede tener más control sobre su vida, tener tiempo para incluir el ejercicio, cocinar alimentos saludables y descansar cuando necesite relajarse. Con menos estrés, puedes escuchar a tu cuerpo y darle más de lo que necesita. Todas las cosas buenas de la vida están a tu alcance. Todo lo que se necesita son algunos pequeños cambios, y verás resultados asombrosos.
10. Mejorar la moral
Cuando las empresas ayudan a los empleados a ser más organizados y productivos, están invirtiendo en el bienestar del empleado. Muchos trabajadores ven la productividad como una forma de exprimir más el trabajo del trabajador. Esta visión tiene que cambiar. El aumento de la productividad es un resultado positivo para todos los involucrados. Cuando los empleados entienden lo que puede significar para ellos mejorar la eficiencia, reducir el estrés y aumentar el control, el bienestar y la concentración, entonces pueden aceptar el proceso y los beneficios que se pueden obtener. Cuando los empleados obtienen los beneficios de una mayor eficiencia, generalmente mejora su moral y compromiso con la empresa.
11. Compromiso creciente
Los trabajadores más productivos suelen estar más comprometidos en su trabajo. El compromiso es el resultado de una serie de factores, que a menudo están relacionados con la calidad del liderazgo, la cantidad de autonomía que un individuo siente y el grado de control que tienen sobre su carga de trabajo. Cuando el esfuerzo que pones en tu trabajo marca una diferencia, estarás más concentrado y comprometido. Cuando los empleados toman el control para organizar su vida laboral, generalmente conlleva un mayor enfoque, compromiso y compromiso, o se trasladarán a otra función laboral que consideren más adecuada para ellos.